CRYPTOCORYNES CON GARRA CHARRÚA
Parte
II
Por Rosario Arijón
Expulsada de A.U.D.A.
rarijonuruguay@hotmail.com
...Esperemos que en los próximos meses de
primavera 2004/verano 2005 esos tres macizos de cryptocorynes no sigan
resentidos y se muevan con la misma fuerza de sus otros hermanos que nunca
salieron al mundo y que no conocen otra vida.
Así terminaba la primera parte de esta
historia. En el verano de 2005 las cryptocorynes que
viajaron a la Muestra del Zoo no solamente crecieron y se reprodujeron a la
par de cualquier temporada normal, sino que también florecieron por primera vez
Compartí la experiencia con Sebastián
Sebas Barilari y con Fernando Sumo Vicente.
Ambos coincidieron en que la floración de cryptocorynes sumergidas en acuarios
de hobbyistas es un hecho muy inusual.
Sebas me proporcionó links para que viera fotos de
flores de cryptocorynes emergidas, y por comparación, ahora
tengo la certeza de que las plantas madres que florecieron sumergidas en mi
cuarto de peces son C. affinis.
Meses atrás intercambié plantas con Sebas. Está
experimentando tratando de hacer crecer cryptocorynes emergidas y me hizo
llegar la siguiente foto.
Foto por Sebastián Sebas Barilari
Sumo dijo: " Es una
verdadera rareza el que florezcan sumergidas. Estas plantas tienen flores
muy especializadas que permiten sólo ser polinizadas por unos insectos muy
específicos que pueden tener acceso al interior de ellas".
Sumo tiene una colección de plantas única en el Uruguay. Las siguientes
fotos muestran parte de esa colección.
Fotos por Fernando Sumo Vicente
Las condiciones en mi cuarto de peces siguen
siendo las mismas, según lo referido en la primera parte de Cryptocorynes con
Garra Charrúa. No tengo filtros ni sustrato en mis
peceras, no agrego fertilizantes, y mis plantas conviven con peces y
caracoles. Tal vez será que hay un equilibrio entre diversos
factores. Como ser un ajustado nivel de nutrientes y haber advertido
que mis cryptocorynes no gustan de ser molestadas cuando están creciendo y
reproduciéndose. Tengo el conocimiento práctico que podría haber
adquirido cualquier observador de la naturaleza. Y como no me preocupo por
la estética, no las mantengo podadas y limitadas a un sector determinado de la
pecera sino que las dejo moverse libres y a su antojo. Tal
vez la clave del éxito es que, como seres vivos que son, a las cryptocorynes
les gusta sentir el sabor a la libertad.
Estas plantas fuertes y hermosas están muy
agradecidas porque las traje de vuelta a casa.
Y es por eso que me regalaron una flor.
|