MARIPOSITA

Characidium rachovi

Por Marcelo Casacuberta

mcasacub@mundomac.com

La Mariposita es un pez pequeño y de carácter pacifico, por lo que puede ser un habitante indicado para el acuario comunitario, siempre que prestemos atención a sus necesidades alimenticias. Su nombre popular sin duda proviene del rápido movimiento que realiza con sus aletas mientras el pez permanece suspendido e inmóvil, al acecho de sus presas, y que recuerda al batir de alas de una mariposa en el aire. Su natación es pausada, si bien pueden realizar rápidas persecuciones siempre que se trate de distancias cortas. La mayor parte de su vida se desarrolla a pocos centímetros del fondo, donde se mueven buscando alimento entre las plantas y troncos.

Como adaptación a su vida cerca del fondo, sus aletas laterales están ubicadas casi a la misma altura que las ventrales, con lo que el pez pasa a tener cuatro aletas sobre las que posarse, mientras acecha los pequeños crustáceos y larvas de insecto a los que gusta de cazar.Su alimentación requiere de suministrarle regularmente presas vivas, como tubifex y daphnia, ya que hacen un consumo limitado del alimento seco, y sin comida viva, resulta difícil que mantengan una buena salud por periodos prolongados.

No son peces de un colorido muy intenso, pero cuando se han aclimatado a nuestra pecera, adoptan un tono ámbar muy agradable, y sus aletas muestran diminutos puntos obscuros en vistoso contrapunto con un fondo rojizo.Una línea obscura cruza el cuerpo todo a lo largo, atravesando el ojo en su recorrido.

Su línea lateral es incompleta, sin poros sensitivos después de la onceava escama lateral. Las Maripositas tenderán a ocupar las zonas de nuestra pecera alejadas de corrientes de filtrado intensas, buscando áreas donde los troncos, pierdas y plantas les permitan encontrar escondites donde se sientan a gusto.Tienen cierto instinto territorial, por lo que los machos suelen perseguir a intrusos que se acerquen demasiado a su zona favorita, o al alimento, pero las pequeñas escaramuzas y persecuciones son mas que nada simbólicas y no producen heridas o lesiones. De hecho conviene poner en nuestro tanque un pequeño grupo de seis o siete peces, que estarán mucho más a gusto que un individuo solitario, que no puede interactuar con otros de su especie. No son demasiado exigentes en cuanto a los parámetros de agua que necesitan, siempre que se eviten valores extremos de PH y dureza, y una temperatura entre los 15 y 25 centígrados.

Los machos son un poco más grandes que las hembras, tienen un colorido más intenso y más largas las aletas, especialmente la dorsal y anal. El desove se lleva a cabo entre las hojas de las plantas, donde el macho fecunda los huevos, una vez que la hembra los va liberando, quedando adheridos a la vegetación. Los padres no llevan adelante ningún cuidado de la puesta, ni tampoco de las crías después de la eclosión. Esta especie tiene una  distribución amplia entre las aguas de Sudamérica, encontrándosela en el sistema del Río Paraná, Rió Uruguay en Río Grande do Sul hasta La Plata, Argentina.

Para aquellos interesados en los peces de nuestras aguas, la Mariposita puede ser una buena incorporación a nuestras peceras, ya que son peces activos y curiosos, siempre recorriendo el fondo del tanque, explorando en busca de comida, tratando de cortejar a una hembra o mantener a raya a sus rivales, ofreciendo siempre un espectáculo interesante a aquellos que decidan ofrecerles un lugar en su acuario.