En Uruguay, la familia de los cíclidos esta representada por varias especies
de diferentes géneros. Estos peces de agua dulce, comúnmente llamados por
"cabeza amarga", "chanchito", "palometa" o "castañeta", habitan en tajamares,
cañadas, arroyos, lagunas, lagos y ríos del territorio nacional. Es muy
difícil decir con total exactitud, cuantas son las especies que habitan en
nuestras aguadas, pero para tener una idea aproximada, podemos decir que son
alrededor de 15 las diferentes especies de "castañetas" o "palometas", unas 5
las de "chanchitos" y unas 8 las de "cabeza amarga". Lógicamente que
estos números no son datos científicos, pero creemos necesario darlos, así de
esa forma, todos podemos tener una idea de que no solo hablamos de uno o dos
tipos diferentes de peces, sino de una gran variedad de especies de esta familia
los que habitan en nuestro país. Todo aquel que este interesado en este tema, al leer artículos acerca de
estos, o al ver fotos de los mismos, es necesario que comprenda que no todas las
especies habitan en todo el territorio nacional; una especie de "castañeta"
puede habitar en el lago del "Parque Rodó" pero seguramente esa misma especie no
se logre encontrar en el Río Cuareim. Así como una castañeta del Río Yaguarón,
no la encontremos en una cañada del departamento de Colonia.
Algunas
especies solamente las encontraremos en tipos de aguada muy definidos, otras a
su vez, podremos encontrarlas en una cañada con fondo de barro o en un arroyo
con fondo de arena...y de ahí la diferencia de "poblaciones" dentro de la misma
especie, o sea peces de la misma especie pero con características diferentes,
como por ejemplo su coloración.
Si a esto le sumamos que a pesar de
tratarse de un país pequeño, las diferencias climáticas existen y eso también
importa a la hora de preguntarnos donde encontrar las diferentes especies,
pronto nos daremos cuenta de que este mundo de los cíclidos, o de las comúnmente
llamadas "palometas", promete ser mas que interesante y da razón para no solo
quedarse con lo visto en las fotos, sino también seguir "investigando" acerca de
ellas.
Nosotros no somos científicos ni mucho menos, pero gracias a que
el interés por nuestros peces es tan pobre "en casa" y tan grande "afuera", un
día decidimos comenzar a trabajar esa loca idea que un tiempo después resulto
ser la parte de "Aqva" en nuestra pequeña empresa familiar y que quizás valga la
pena contar como comenzó:
En el año 1980, viviendo en Suecia, un amigo
uruguayo me pidió que lo acompañara a una tienda de peces para elegir algunos
para su nueva pecera.
En la tienda, el solamente observaba todos aquellos
que según el eran los únicos viables para un acuario, o sea; todos de menor
tamaño y con mucho color.
Mientras mi amigo seguía sin decidir que
"color" llevar, yo encontré una pecera bastante escondida con algo que se
parecía a una "castañeta negra" o "chanchito", de esas que pescaba con una
botella y pan en los lagos del Parque Rodó.
El dueño de la tienda se
acerco y me pregunto si sabia lo que era. Le respondí que la mugre del vidrio no
me dejaba ver muy bien, pero que se parecía muchísimo a un "tipo" de pez que
había en mi país.
"Ah si??"..."y de que país me estas hablando?", me dijo
el sueco con tono de sobrador. "De Uruguay", le respondí, y largando la
carcajada mas grosera del día, el dueño de la tienda me responde; "Imposible,
ese es un "ciancitu de Buanosoires", así nomás, todo junto y sin un gramo de
acento español.
El hombre no quedo muy contento cuando le dije que
"chanchito" era el nombre común del Cichlasoma facetum, o sea el nombre
científico de ese ejemplar, el cual seguramente vendría de Buenos Aires, pero
que también habitaba en nuestro país.
La visita en la tienda termino con
que mi amigo compro un par de kilos de pececitos rojos, azules y negros y el
sueco me confeso que el "chanchito", argentino, no lo vendía por nada del mundo
ya que ya a nadie le interesaban los "pececitos de colores" y el estaba
esperando por una hembra para reproducir "chanchitos", ya que estos si están
llamando cada día mas la atención.
Desde ese día, cada vez que tenia la
oportunidad, trataba de visitar nuevos acuarios, y al pasar el tiempo, me di
cuenta que el sueco en algo tenía razón; no se si las peceras de los "pececitos
de colores" eran menos que antes, pero si eran cada día mas las peceras que
contenían cíclidos de todo el mundo.
Los años pasaron y un buen día
(literalmente) me harte de leer sobre cíclidos de Brasil, México y Malawi, o de
ver en las tiendas cíclidos de Paraguay, Bolivia o Tanganyika, como, o mejor
dicho, porqué era posible que hubiesen cíclidos de todos los países de donde
estos se encuentran menos Uruguay?....y cuando digo "menos", no me refiero a
Uruguay y otros, no, me refiero pura y exclusivamente a Uruguay.
Ya en el
90, los acuarios mas surtidos, ofrecían a sus clientes cíclidos de todas los
países donde estos estaban representados, menos Uruguay, y en el 95, comenzaron
los acuarios "especializados", o sea, acuarios que solamente ofrecían cíclidos,
lógicamente menos de Uruguay. Y así comenzó todo, y para no ser tan extenso, la
cuestión es que mal o bien, y a pesar de todos los problemas que no solamente
afectan a los "acuaristas", sino a todos los que viven en esta tierra, hoy por
hoy son varios los países que nos han comprado cíclidos uruguayos y a pesar de
la lamentable rentabilidad de esto, tenemos el orgullo de poder decir que fuimos
los primeros en exportar cíclidos uruguayos a Dinamarca, Suecia, USA y Alemania
y de esa manera dejar de ser (por lo menos en esos países de gran nivel
acuarista) el único país que no estaba representado con sus cíclidos.
Sus
colores, su reproducción, el cuidado y la defensa de sus crías, su adaptación a
diferentes habitats, etc, etc, hacen que los cíclidos sean para los acuaristas
de todo el mundo, de los peces con mejor aceptación, y hoy día existen en varios
países, empresas importadoras que ya no solamente se dedican a cíclidos en
general, sino que se han especializado en cíclidos de un solo país de origen, el
caso de importadoras de Brasil, Perú, México, Kenya o Congo.
|